Para recordar ese verano que quieren hacernos creer que ya pasó... ;-) hoy venimos con una tarta del fondo del mar:
Y es que, como cada año, como ya ha empezado el cole... ¡Ya no es verano!
Da igual que nos estemos asando de calor, que tengamos unas ganas locas de darnos un chapuzón en la playa y que ni nos hayamos planteado aún sacar abrigos del armario... está claro que es el calendario escolar el que marca el fin del verano, ¡aunque no tengas niños!
Y por si fuera poco y no nos hemos enterado de lo del cole, las tiendas ya tienen puesta su ropa de invierno, bien abrigadita. Eso sí con el aire acondicionado a tope, porque si no con solo verla ya empezamos a sudar jajaja.
Pues nosotras vamos a alargar un poco el verano, aunque sea con una tarta :D
Va toda llena de pececitos, porque así nos la pidieron.
Aunque le añadimos algunas algas, conchas y estrellas de mar para que reflejara mejor el fondo del mar. Vaaaaale, y para darle un poco más de colorido jeje.
La base azul de fondant que le pusimos a la tarta iba marmolada; para que simulara más aún el mar, si no iban a parecer peces volando por el cielo jajaja.
La tarta era un bizcocho cremoso de vainilla bien almibarado e iba relleno de varias capas de ganache de chocolate. Una combinación muy clásica pero que está gustando mucho últimamente.
Esperamos que te haya gustado, besitos.
Y es que, como cada año, como ya ha empezado el cole... ¡Ya no es verano!
Da igual que nos estemos asando de calor, que tengamos unas ganas locas de darnos un chapuzón en la playa y que ni nos hayamos planteado aún sacar abrigos del armario... está claro que es el calendario escolar el que marca el fin del verano, ¡aunque no tengas niños!
Y por si fuera poco y no nos hemos enterado de lo del cole, las tiendas ya tienen puesta su ropa de invierno, bien abrigadita. Eso sí con el aire acondicionado a tope, porque si no con solo verla ya empezamos a sudar jajaja.
Pues nosotras vamos a alargar un poco el verano, aunque sea con una tarta :D
Va toda llena de pececitos, porque así nos la pidieron.
Aunque le añadimos algunas algas, conchas y estrellas de mar para que reflejara mejor el fondo del mar. Vaaaaale, y para darle un poco más de colorido jeje.
La base azul de fondant que le pusimos a la tarta iba marmolada; para que simulara más aún el mar, si no iban a parecer peces volando por el cielo jajaja.
La tarta era un bizcocho cremoso de vainilla bien almibarado e iba relleno de varias capas de ganache de chocolate. Una combinación muy clásica pero que está gustando mucho últimamente.
Esperamos que te haya gustado, besitos.
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